La innovación tecnológica nos ha colocado en un momento de la historia donde somos capaces de producir cartografía más rápido y con menor coste que en ningún otro momento de la historia. Sin embargo la producción casi industrial dela cartografía no nos garantiza un consumo eficiente de la información geolocalizada. Este desequilibrio es una de las principales causas que motivaron la creación delas Infraestructuras de datos espaciales (IDE). Así lo constata la Directiva Inspire europea en su exposición de motivos.
Los problemas relativos a la disponibilidad, calidad, organización, accesibilidad y puesta en común de información espacial son comunes a un gran número de políticas y de temáticas, y se hacen sentir en los diferentes niveles de la autoridad pública. La resolución de estos problemas requiere medidas que atiendan al intercambio, puesta en común, acceso y utilización de datos espaciales interoperables y de servicios de datos espaciales, medidas que conciernen a los diferentes niveles de la autoridad pública y a los diferentes sectores. Por consiguiente, debe establecerse una infraestructura de información espacial en la Comunidad.
No son las IDE los únicos medios tecnológicos de acercar la producción de datos al consumo, aplicaciones de la geonube y APIS son dos de los principales medios que acompañan a las IDE en la tarea de integrar, difundir y compartir la información de una organización con sus usuarios.
No es misión de las IDE, APIS y aplicaciones de la Geonube proporcionar una producción eficiente de los datos espaciales, estas tecnología sólo se centran en garantizar la disponibilidad e interoperabilidad de la información. Así que es necesario que las organizaciones públicas o prividas creen un sistema productivo, con su estructura y procedimientos de tratamiento del flujo de información, que sea capaz de integrar la producción cartográfica en el quehacer cotidiano de su actividad. Esta estrategia es más económica y eficiente a largo plazo que las actualizaciones periódicas, las cuales siempre tiene que asumir un periodo de tiempo de sacrifico, de espera, de información desactualizada, de incertidumbre que siempre va acompañada de un coste económico mayor . Sin producción de datos espaciales continua no hay consumo cartográfico exitoso posible.
Una producción eficiente no sólo es la que se hace bajo la demanda de la propia actividad, también debe poseer otras características. Siguiendo los principios Lean podemos resumirlas en 6 pasos:
- Proporcionar al usuario el valor que realmente requieren. La cartografía debe ser apta para el consumo que tenga previsto el usuario.
- Identificar el flujo de valor del producto cartográfico desde su concepción hasta que lo ponemos en manos del usuario.
- Eliminar las esperas y tiempos de rspeusta creando un flujo continuo,
- Dejar que el usuarios aporte valor a la organización. Algunos ejemplos los podemos encontrar en los PP-SIG. UGC-SIG, las técnicas de Crowdsourcing. EL usuario se convierte en un prosumer de información espacial.
- Retroalimentar el proceso de producción en una búsqueda de la perfección.
- La finalidad de la producción no es subir los datos aun servidor, a un API o a una IDE es proporcionar valor la usuario en su experiencia de uso y utilidad de la inforamción cartográfica.
Si la organización no asume estos retos como parte integrante de su estrategia de producción, el dato espacial pasará a formar parte de la colección invisible y sin valor, generando más adelante costes cuando sea necesario utilizarla. los datos espaciales dejan de ser el «intel inside» de una organización para convertirse en una molestia de difícil gestión.
Tras la producción viene tradicionalmente el consumo. El consumo actual tropieza con dificultades, muchas de ellas nacen en el propio proceso de producción, que en ocasiones olvida una idea simple la finalidad de la creación de datos es el consumo de los datos. Un ejemplo muy habitual lo tenemos en las bases de datos que codifican numéricamente los dominios de un campo de su tabla de atributos sin ningún alias que traduzca al usuario la información sino es mediante la consulta de un documento auxiliar.
En un entorno tan tecnológico y tecnificado como el actual podría pensarse que el consumo es un tema resuelto, sin embargo la realidad es bien distinta, debiera ser más amable y satisfactorio, requerir menos tiempo para conseguir la información y evitar que sea preciso realizar conversiones de formatos. Nos perdemos en un mar de datos y aplicaciones, la producción no debe centrase de manera exclusiva en generar datos espaciales excepcionales, sino proporcionar un consumo exitoso.
El consumo debe ser amable y satisfactorio, abierto aun amplio espectro de usuarios, con necesidades en ocasiones distintas. El consumo debe tirar, empujar o impulsar una producción eficiente de los datos. Los productores de cartografía debemos girar nuestra forma de trabajo, aprender a escuchar las necesidades de los consumidores de datos espaciales y crear lineas de dialogo permanente con ellos. ¿qué sentido tiene producir datos de dificil consumo?