¿Lujo o necesidad?
Dejando a un lado la geografía, hoy plantemos una cuestión meramente técnica ¿es necesario elaborar una cartografía asociada a los instrumentos de ordenación del territorio?. Hay dos corrientes doctrinales que presentan puntos de vista divergentes en cuanto a su efecto y método de construcción.
La primera sostiene que la cartografía de la ordenación territorial solo tiene un carácter orientativo, nunca supletorio de la realidad que representa, y por tanto es prescindible. Es decir está corriente propone la existencia de una ordenación del territorio, basada en definiciones formales, sin expresión cartográfica asociada la realidad. Esta corriente se sostiene especialmente por los planificadores, en el ámbito de ordenaciones territoriales sectoriales, con objetos bien definidos normativamente pero con una cartografía costosa de obtener, que en muchos casos se considera un lujo difícil de adquirir. La OT es independiente de la cartografía.
Un segundo grupo argumenta el carácter de aplicación plena de la cartografía y su necesidad para la definición del objeto de ordenación. El texto normativo es en este caso prescindible, o al menos accesorio, ya que es la definición espacial la que identifica normativamente el objeto de ordenación. La cartografía en esta línea es necesaria ya que aunque fije la realidad a un momento dado y pueda tener distorsiones de escala, permite identificar jurídicamente a las áreas de notificación y regulación. Esta corriente es seguida principalmente por los planificadores cuyas zonificaciones son el resultado de la integración factorial.
Aunque en los instrumentos de ordenación territorial se usan en la actualidad ambas posturas. La directiva INSPIRE marca la diferencia en Europa y posiblemente el camino a seguir. Ya que considera necesaria la definición espacial de las unidades territoriales objeto de regulación, es decir respalda en cierta medida el efecto pleno que mantiene la segunda corriente doctrinal. En este sentido la cartografía es necesaria en la OT. No existe OT sin cartografía
Centrándonos en un ámbito internacional, es difícil lograr la compresión de la expresión espacial de las políticas económicas, sociales, culturales y ecológicas de la sociedad que propugna la Carta Europea de Ordenación del Territorio, sin una cartografía que la sustente, tanto en su diagnostico cómo en su zonificación.
Una cuestión abierta es si basta con una definición espacial o es conveniente disponer de una definición normativa del espacio zonificado.
Fuente imagen: Instituto de urbanística UVA
gracias no se encuentra mucha informacion sobre y tuds la tienen bien explicita